domingo, 29 de noviembre de 2015

Las nuevas generaciones vienen pisando fuerte (y II)

¡Saludos, queridos Rebeldes! Lo prometido es deuda, así que hoy os traigo una entrada dedicada a otra novela de Julia Barrett. Esta vez, la autora retoma la trama y los personajes de Sentido y sensibilidad para su segunda novela: La tercera hermana (The Third Sister: A Continuation of Jane Austen’s Sense and Sensibility; 1996).

Como se puede deducir del título del libro, la protagonista es Margaret Dashwood, la hermana menor de Elinor y Marianne. Tres años después del final de la novela original, Margaret Dashwood es una inteligente joven de diecisiete años que vive con su madre tras los matrimonios de sus hermanas mayores. Al haber sido testigo de los sufrimientos de Marianne por culpa de Willoughby, Margaret ha aprendido a desconfiar de los jóvenes atentos y galantes como él, por lo que trata con frialdad al apuesto militar franco-inglés William du Plessy, hijo de una dama con la que traba amistad, y se muestra afectuosa con el tímido George Osborne, primo de Edward Ferrars. Sin embargo, es posible que las malas experiencias del pasado la conduzcan a un juicio erróneo…

latercerahermana

Me topé con esta novela por primera vez hace muchos años, hojeando un catálogo de compras por correspondencia de un primo mío, pero no la relacioné con Jane Austen (era aún bastante pequeña y ni siquiera había oído el nombre de esta autora) y no tardé mucho en olvidarla. Años después, la redescubrí junto con Presunción y las devoré gustosamente.

En cuanto al libro en sí, Barrett ha creado una obra de lo más interesante, aunque se tome alguna licencia con el libro original que no ha gustado mucho a las fans; por ejemplo, para meter en escena a George Osborne, la autora hace que la señora Ferrars desherede a sus dos hijos y convierte a su sobrino en el futuro administrador de sus bienes. Pero en fin, en mi opinión tampoco es un crimen.

Los personajes originales de la obra se mantienen fieles a cómo los creó Jane Austen (así, vemos que la señora Jennings o los Middleton siguen siendo tan desconsiderados y metomentodos como siempre), mientras que los nuevos están bien perfilados (incluida la propia Margaret, a la que Barrett ha convertido en una inteligente joven que posee el punto exacto de buen juicio entre la sensatez de Elinor y el sentimentalismo de Marianne). Asimismo, otro detalle que es necesario destacar es el lenguaje de la obra, muy fiel a cómo escribía nuestra querida Jane (aunque por desgracia esto es algo que no se ve en el texto traducido…).

Para terminar, solo me queda decir de La tercera hermana que es una muy buena opción para aquellos que busquen una novela amena, fiel al espíritu austeniano, y para aquellos que desean saber cómo habría podido seguir la historia de las Dashwood y, sobre todo, qué habría sido de la pequeña Margaret si hubiésemos podido verla convertida en una joven dama.

Hasta la próxima página,

La Rebelde de los Libros

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Las nuevas generaciones vienen pisando fuerte

Como ya escribí en la entrada dedicada a la trilogía Fitzwilliam Darcy, un caballero, muchos escritores modernos se han dedicado a recoger el testigo de autores del pasado para reescribir sus obras o bien continuarlas con los mismos protagonistas o poniendo de protagonistas a personajes que fueron secundarios en las obras originales. Esta novela que os recomiendo hoy pertenece al segundo grupo: se trata de Presunción (Presumption: An Entertainment; 1993), de Julia Barrett, que continúa la historia de Orgullo y prejuicio. En este caso, si bien Elizabeth y  Darcy son personajes de mucho peso en la obra, no son ellos los protagonistas, sino Georgiana, la hermana menor de él.

La trama comienza dos años después del final de la novela original. Georgiana Darcy se ha convertido en una bella y alegre joven de diecisiete años, de buen corazón, pero al mismo tiempo muy altanera; este mal carácter le traerá no pocos problemas con algunos de los que la rodean, y Georgiana acabará metida en un triángulo amoroso con un galante capitán, y un cínico paisajista. Así, al igual que su hermano y su cuñada, Georgiana deberá aprender a no solo a no dejarse llevar por las apariencias, sino también a andarse con menos humos…

presunción

Descubrí esta novela, como seguramente habréis imaginado, buscando por Internet adaptaciones y continuaciones de novelas de Jane Austen después de haber catado la trilogía anteriormente mencionada. Lo cierto es que la trilogía me gustó más que este libro, pero realmente Presunción no está nada mal. Los personajes originales están bien reproducidos (si bien la altanería de Georgiana me resulta un tanto forzada teniendo en cuenta el carácter tímido y dulce del personaje original) y los originales creados por Julia Barrett, muy bien construidos.

Por otro lado, la historia no se limita a reproducir la trama de Orgullo y prejuicio (como podría deducirse por el argumento que os acabo de contar), sino que cuenta con más sub-tramas que dan más consistencia a la trama principal. De hecho, una de ellas consiste en la implicación de un personaje secundario original en un delito (no voy a revelaros quién ni qué) que puede costarle la vida si no logra probar su inocencia.

Poco más puedo decir de este libro, que os gustará mucho si buscáis una novela alegre y entretenida con la que pasar una buena tarde. En breve, veréis también en el blog una entrada más dedicada a otro libro de esta misma autora.

Hasta la próxima página,

La Rebelde de los Libros

domingo, 24 de mayo de 2015

¡Nada que ver con la música culta!

Digo esto porque la musicalidad del título de mi nueva recomendación quizá os sugiera la maravillosa pieza para piano de Claude Debussy. Pero no, volvemos a las andadas para recomendar una novela que llevaba años deseando leer y que por fin he conseguido catar: Claro de luna (Carolina Moon, 2000), de la celebérrima Nora Roberts.

La historia transcurre (como quizás podáis suponer por el título original) en una pequeña ciudad de Carolina del Norte (EE.UU.), de nombre Progress. Nuestra protagonista es Victoria Bodeen, alias “Tory”, una joven con poderes extrasensoriales. Criada por un padre fanático que la considera una bruja y una madre que mira para otro lado cuando el padre la maltrata, la pequeña Tory solo encuentra cariño y apoyo en su íntima amiga, Hope Lavelle. Sin embargo, Hope es brutalmente violada y asesinada y los Bodeen se marchan del pueblo.

Ya adulta, Tory vuelve a Progress para establecerse y abrir un negocio. Entre apoyos de unos y rechazos de otros, Tory comprobará que el pasado siempre vuelve. Sobre todo cuando descubra que el asesino de Hope, que nunca llegó a ser capturado, sigue en activo…

carolinamoon

Esta novela llegó a mis manos en su idioma original, lo que me permitió disfrutar de los exóticos giros lingüísticos del inglés del sur de EE.UU. e imaginarme a la perfección los acentos y modos de hablar de los personajes, así como los extensos campos de cultivo y los profundos bosques llenos de lagunas y pantanos (prácticamente iguales a como los vi hace poco en el telefilme que adapta este libro).

Dentro de la variopinta gama de personajes, podemos encontrar tanto personajes que se hacen querer como personajes a los que les partirías las piernas si pudieras meterte dentro de la novela. Dentro del primer grupo tengo que destacar la propia Tory, fuerte y frágil a la vez, que ha recibido miles de golpes (tanto físicos como psicológicos) a lo largo de su vida y ha sabido seguir adelante; y Faith y Cade Lavelle, respectivamente la hermana gemela y el hermano mayor de Hope. Ella, una joven alocada y rebelde que trata de buscar su camino en el mundo; él, todo corazón y con una gran capacidad para amar (en el buen y en el mal sentido de la expresión). Las estrellas del segundo grupo son (como no podía ser de otra manera) Hannibal y Sarabeth Bodeen, los padres de Tory, tal para cual y a cual peor, pero también hay sitio para la señora Lavelle, una mujer tan clasista como rencorosa.

cmfilm

Carátula de la película, disponible en Youtube en V.O.S.

Después de contar tantas cosas buenas sobre este libro, ahora tengo que hablar del único defecto que le he encontrado: el final, abrupto a más no poder y que te deja con ganas de más; si no con una segunda parte, al menos con un epílogo, como sí se ha hecho con la adaptación fílmica. Pero en fin, nunca se sabe; es posible que a la señora Roberts le dé por recuperar personajes y quizás algún día volvamos a ver a Tory y Cade. Hasta entonces, nos quedamos con este estupendo libro, lleno de personajes que dejan huella y que mantiene el interés y la intriga hasta la última página. Literalmente.

Hasta la próxima página,

La Rebelde de los Libros